Reforzar el proceso artístico y creativo en niños y niñas del corregimiento de Bocachica, fue el propósito de las vacaciones creativas realizadas en el fuerte de San Fernando, en cumplimiento del plan de puesta en valor de la Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR) en las comunidades del área de influencia de los Bienes de Interés Cultural de la Nación.
Las actividades de la jornada, que se extendieron hasta el sábado 22 de diciembre, fueron lideradas por la Fundación Estanque de Poder que pretende impulsar el arte y el emprendimiento, teniendo como bandera la salvaguarda y valoración del patrimonio, desde el cuidado de su entorno.
Con el objetivo de potenciar el resguardo del patrimonio creativo de las artes vivas, incentivando su desarrollo, investigación y formación en las comunidades, la ETCAR, emprendió esta actividad con los niños bocachiqueros que participaron en la segunda versión del 2018 de las vacaciones creativas.
Mi más valioso patrimonio
Durante los cinco días de la jornada, los 100 niños y niñas realizaron un recorrido por los alrededores de las fortificaciones, recreando la historia del cacique Cárex, como parte del relato oral de ese corregimiento. Participaron además de una actividad físico – recreativa enmarcada en el concepto “El cuerpo, mi más valioso patrimonio”.
Además de disfrutar la proyección de la película sobre patrimonio natural “Baraka”, recorrieron los alrededores en búsqueda de objetos reciclados para convertirlos en arte, en desarrollo de la actividad “El reciclaje salva el patrimonio”.
Los juegos tradicionales de Bocachica, también formaron parte de la agenda creativa, liderada por un sabedor ancestral del territorio, quien orientó un ejercicio del reciclaje como elemento de salvaguarda, a partir de un proceso de elaboración de productos artísticos con objetos reciclados.
La Fundación Estanque de Poder, encargada de las vacaciones creativas en esta oportunidad, le puso ritmo a la programación con una rumbaterapia para estimular el desarrollo psicomotriz (mente y cuerpo) de los pequeños. Así mismo, impulsaron el arte como emprendimiento, a partir de productos artísticos con objetos reciclados.
Las manualidades del patrimonio creativo quedaron plasmadas en unas camisetas
que los pequeños artistas lucieron durante la clausura con el montaje “La tienda de San Fernando de Bocachica”, en la que expusieron los productos elaborados en la semana de actividades, ambientados con show de música y bufet de dulces.
“En cada temporada vacacional, la Escuela Taller aprovecha este tiempo de los niños, niñas y adolescentes que viven en las comunidades de las áreas de influencia de los Bienes de Interés Cultural (BIC), para convertir sus vacaciones en herramientas pedagógicas que refuerzan su aprendizaje creativo”, explicó el director de la institución, Álvaro Gómez Poveda.