Con la campaña ‘¡Digamos presente!’ llegó la Secretaría de Educación Distrital a distintas instituciones educativas de la zona rural de Cartagena para invitar a los estudiantes a no desertar de las escuelas, a no rendirse y a ver en la educación el camino que los llevará a vivir un mejor futuro.
Con un recorrido por las instituciones educativas Santa Ana, Ararca y Técnica de Pasacaballos, se inició esta campaña que busca motivar a los estudiantes al esfuerzo y compromiso con la educación, mostrándoles los beneficios que corto, mediano y largo plazo trae educarse.
Un equipo encabezado por la secretaria de Educación, Claudia Almeida Castillo, y los directores de las unidades de Cobertura y Calidad Educativa, llevó personalmente el mensaje a los estudiantes de estas zonas, y como testimonio del compromiso, los estudiantes plasmaron las huellas de sus manos en carteleras de motivación.
Según Almeida Castillo, la Secretaría de Educación cumple aquí con varios propósitos a la vez, pues se ejecuta un plan para frenar la deserción escolar y, a la vez, se privilegia la atención en las instituciones de la zona rural e insular de Cartagena.
Pedro González, director de Cobertura Educativa y coordinador de la estrategia ¡Digamos Presente!, durante la actividad hubo espacio para realizar juegos didácticos, hacer reflexiones, dialogar y asumir compromisos.
“La Secretaría se compromete a brindar los espacios y las herramientas adecuadas para la formación de estas comunidades educativas, y estas, a su vez, a aprovechar al máximo la oportunidad de educarse, aprender y aportar ese conocimiento a la sociedad, indicó el funcionario.
La estrategia también propicia un espacio entre la Secretaria de Educación Distrital, Claudia Almeida Castillo, y rectores, docentes y administrativos de estas instituciones, para abordar diversas temáticas de interés para el establecimiento educativo y su población estudiantil.
En estas tres Instituciones Educativas hay registro de 3.212 alumnos matriculados, y el propósito de la estrategia es llevar los índices de deserción a nivel cero, de modo que todos los alumnos se mantengan dentro del sistema educativo.